Las autoridades de Cataluña concluyeron el pasado miércoles 12 de mayo la búsqueda de los restos del escritor cubano Pablo de la Torriente Brau (1901-1936) en el cementerio barcelonés de Montjuic.
Los peritos de la Dirección General de Memoria Democrática del Gobierno catalán descartaron que exista una fosa común en la zona del cementerio donde el pasado 28 de abril se inició la excavación.
La consejería de Justicia de Cataluña informó que los arqueólogos consideran que no existe una fosa común en el lugar en el que, de acuerdo con testimonios, podía estar enterrado el periodista junto a otras 11 personas.
La búsqueda inició hace dos semanas y las excavaciones se realizaron hasta la capa geológica –el nivel anterior a cualquier intervención humana–, sin hallar restos, explicó en un comunicado la consejería.
La institución declaró que no se llevará a cabo una nueva perforación porque no existen otras hipótesis sobre el lugar de entierro de los restos del intelectual.
De la Torriente, quien luchó en el bando republicano durante la Guerra Civil y murió en combate en Majadahonda (Madrid), el 19 de diciembre de 1936, fue enterrado inicialmente en el cementerio madrileño de Chamartín. Sin embargo, en junio de 1937 fue trasladado a un nicho del camposanto de Montjuic.
El resultado del conflicto bélico impidió que sus restos regresaran a Cuba, y en 1939 fueron arrojados a una fosa común junto a los de 11 personas que permanecen sin identificar.
Un convenio firmado en 2018 entre el Gobierno catalán, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consulado General de Cuba en Cataluña permitió reactivar el proceso para llevar los restos de Pablo de la Torriente Brau a su país, como era su voluntad y la de sus descendientes.
(Con información de Prensa Latina)
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