Oni Acosta Llerena
Hace varios años, como resultado de las negociaciones entre Cuba y EEUU, se inició un proceso de normalización entre ambos países y que la prensa internacional y el propio gobierno norteamericano llamaron deshielo. Desconozco si es término usado en diplomacia o mero adorno propagandístico, pero más que un deshielo como tal, desde lo cultural significó —aún hoy día— una avalancha de seducciones casi sin precedentes desde 1959.